A 8 kms de Pontevedra, cogiendo la carretera de Ponte Caldelas, y pasando por el parque empresarial O Campiño, nos encontramos con el monte A Fracha. Despues de ascender por una pista asfaltada, con mucha vegetación en sus laterales, y despues de serpentear por unas y otras rutas, y dependiendo de la vertiente que elijamos, podemos tener unas muy buenas vistas sobre la ciudad de Pontevedra, así como de la mayor parte de las parroquias de su entorno.

La primera vista que nos aparece, y para eso es aconsejable coger la ruta de la izquierda, ya cuando hemos ascendido a la mitad de la montaña, y mirando hacia el oeste, vemos Pontevedra y la Ría de Pontevedra. Al pié del monte tenemos la parroquia de Marcón, con todas las casas repartidas a lo largo y ancho del territorio. Muy cerca de este punto existen unas mesas donde poder sentarse a tomar un pic-nic y descansar.

Si damos la vuelta, retrocediendo unos 200 metros, bajamos y cogemos ruta hacia el sur, bordeando el monte y pudiendo parar en varios puntos, para observar vistas sobre el mismo monte, fuentes, ruachuelos y sobre las parroquias de Tomeza, Salcedo, y al fondo, la penísula de O morrazo.

La pista que hemos transcurrido hasta ahora estaba asfaltada, pero llegamos a una con el pavimento de grava, por la que tenemos que circular despacio. Unos 800 m. mas adelante ya observamos al fondo el mar, la ensenada de San Simón.

Es una situación privilegiada para observar este panorama, pues se ve toda la ria de Vigo, cogiendo toda la ensenada hasta el puente de Rande. Unas estupendas vistas que, en dia claro y sin bruma, se pueden obtener unas magnificas panoramicas.

Continuando el camino, y con la pista por donde circulamos, que continua siendo de grava y con algun que otro bache, podemos seguir observando fuentes, que se utilizan para que los caballos que andan sueltos por el monte puedan abrevar, riachuelos y una gran variedad de flora. También se pueden ver animales sueltos (caballos y vacas).

Vamos a empezar una bajada, que pasa por delante de unas canteras, por lo que por esta zona tenemos que reducir la velocidad, puesto que debido al paso de los caminones, existen bastantes irregularidades en el pavimento. Esta bajada nos lleva a la confluencia de una carretera asfaltada, bastante estrecha, que si cogemos a la izquierda nos lleva al municipio de Ponte Caldelas, y a la derecha vamos hacia Soutomaior.

Se aconseja andar con precaución, puesto que por estos recorridos suelen andar bastantes ciclistas practicando bicicleta de montaña.

Todo este recorrido se puede reallizar en aproximadamente en 60-90 minutos, dependiendo de lo que se invierta en las paradas, pero merece la pena realizarla.